Tener panda la columna (hiperlordosis lumbar) es una de las causas más frecuentes de dolor de espalda, se debe a exceso de peso, debilidad de músculos abdominales, partos o cirugías en el abdomen.

Con las posturas y movimientos adecuados al levantar pesos o transportarlos, y al realizar muchas de las tareas cotidianas, podemos marcar la diferencia en la salud de nuestra espalda.

Para no lastimarnos la espalda al levantar un objeto debemos aproximarnos a él lo mas posible, flexionar nuestras piernas y levantar el objeto lo más cercano a nuestro cuerpo con la columna derecha. Es importante repetir estos cuidados al dejar el objeto: piernas separadas, objeto cerca de nuestro cuerpo y columna erguida.

Nuestra espalda nos puede doler por un golpe, malas posturas o bien porqué le damos un uso inadecuado, ya que no sabemos levantar objetos sin dañarnos nuestra espalda.

La columna vertebral está compuesta por cubitos de hueso llamados vértebras, que además de dar el soporte para el movimiento de nuestro cuerpo, sirven para proteger a la médula espinal, que va por dentro de la columna.

Si eres diabético o tienes un familiar que lo sea, debes saber que el mayor riesgo en los pies es de amputación si no se tiene los cuidados adecuados. El paciente diabético pierde la sensibilidad en los pies, su piel se desacata, sus dedos se deforman, deja de sudar y todo esto es a una mezcla de alteraciones de su circulación y por inflamación que el azúcar elevado causa en los nervios del pie.

Los juanetes se deben a desequilibrios musculares, propiciados por el uso de calzado de horma estrecha y tacón elevado, tienen predisposición familiar y son más frecuentes en mujeres. Su tratamiento es a base de ejercicios, uso de plantillas especiales y separadores en la noche.

Los callos de los pies te salen por un defecto en el apoyo. Como se ve en la foto cursa con dedos en "garra", y la solución no es como la mayoría cree, de estarlos cortando. Solamente corrigiendo el apoyo por medio de plantillas y ejercicios, consigues que se vayan para siempre.

La rodilla de la izquierda tiene un cartílago nacarado, brillante y saludable, mientras que la de la derecha está gris, despulido y enfermo. Para prevenir las lesiones del cartílago debemos mantener nuestras rótulas alineadas.

El tratamiento más efectivo es a base de ondas de choque y plantillas.